sábado, 19 de julio de 2014

Más produzcas, más prosperes

El siguiente paso de la sociedad debe ser una Cuarta Postura, simplemente porque ya llevamos tres ensayos fallidos.
Se han probado tres tipos diferentes de "relaciones laborales" 
que no funcionaron porque eran distintas a las "naturales".
Ya llevamos docientos años de prueba y error pero "el poncho no aparece".

Veamos la secuencia:

Antes era sencillo. Si alguien hacía una silla, se le pagaba por una silla. Y si hacía dos, se le pagaba por dos.
POSTURA CERO: Más producías, más prosperabas.

Pero la revolución industrial modificó profundamente las formas de producción. Entonces para que la sociedad no sufriera el golpe, las relaciones laborales fueron una incógnita a resolver.

Los EMPLEADORES creyeron tener el tino necesario para administrar los excedentes que producían sus empleados, de manera de no hacerles faltar nada y cuidar sus intereses.
Nació así el capitalismo:
PRIMERA POSTURA: Más producías, más previsión conseguías.

No pasó mucho tiempo para advertir los interminables conflictos que esa "protección del empleador" detonaba.
Hubo sublevaciones gritando que las empresas eran el problema y queriendo asignarle al ESTADO la responsabilidad de la producción industrial.
Nació así el comunismo:
SEGUNDA POSTURA: Más producías, más homenaje recibías.

Tampoco pasó mucho tiempo para advertir que sin incentivos, ni el capital ni los empleados producían excedentes para el progreso.
Los filósofos buscaron una DOCTRINA SOCIAL. Hicieron que los empleados fueran protegidos del Estado. Los excedentes de los empleados le serían retenidos a "su" empresa. La tercera parte de las ganancias de las empresas sería un Impuesto a las Sociedades.
Se vino el populismo que rige hoy en todo el mundo:
TERCERA POSTURA: Más produces, más "solidaridad" construyes.

Hoy advertimos que los incentivos también son esenciales a nivel del trabajo. Los EMPLEADOS también deben participar de los dividendos de los excedentes de la sociedad para involucrarse como ciudadanos.
No podemos seguir abatiendo a los esforzados y envalentonando a los indolentes, porque eso ha iniciado un círculo vicioso de adicciones y delincuencia por la falta de objetivos que experimenta el 90% de la población.
El IMPUESTO A LAS SOCIEDADES debe asignarse a sus verdaderos dueños: el personal de "esa" empresa.
Volvamos a las relaciones laborales naturales.
CUARTA POSTURA: Más produzcas, más prosperarás.

Sólo tú tienes el tino necesario para administrar los excedentes que produces para prosperar.

La Cuarta Postura by Néstor González Loza

miércoles, 16 de julio de 2014

¿Capitalismo o Mercado?

La mayoría de los políticos confunden capitalismo con mercado, que son dos conceptos casi opuestos.
Y por no entender quién es su enemigo hacen que su pueblo viva como cautivo sin salida.
"Capitalismo" es un sistema de relaciones laborales que nació con la revolución industrial, y consistía en que el empleador se quedaba con las ganancias de sus empleados.

El "Mercado" en cambio nació con el ser humano, cuando quiso comerciar sus excedentes. Su tamaño es el tamaño de las comunicaciones.

El "capitalismo", aunque a muchos les parezca increíble, ya murió.

El populismo logró confiscar la tercera parte de las ganancias de todas la empresas.
Eso transfirió la ganancia de los empleados al Estado, con lo cual murió el capitalismo.

Eso hay que exigirles a los políticos:
QUE DEVUELVAN LA PLUSVALÍA

Los empleadores ya se las tributaron.

Confundir el enemigo los transforma en Quijotes y su ridícula contienda con los molinos.

Se viene un cambio de dirigentes.
Se viene nuestra libertad del populismo quijote.


viernes, 11 de julio de 2014

Tú eres la vía

Tú eres la vía hacia la sinergia que acabará con el populismo.
Si hay una vía de acceso para modificar las relaciones laborales no es la de los políticos, ni la de los periodistas, ni la de los economistas, porque están cooptados por el populismo.
Inexorablemente terminan aceptando la doctrina nefasta del asistencialismo, por una cuestión de supervivencia.

AHORA, VAMOS POR LA LIBERTAD!


 

La tercera parte de las ganancias de todas las empresas ya no debe ser para el Estado populista, sino para el personal propio y de terceros, de "esa" empresa.

Si el sistema pagara los excedentes al personal de las empresas, los políticos perderían su ocupación.
Por eso el sistema termina siempre pagando sólo 
lo que los empleados exigen para vivir. Y les infunden el miedo paralizante para mantenerlos bajo control.

El género humano "conducido" jamás tuvo un abogado que hiciera valer su mayor esfuerzo y su creatividad

Todo ser humano está preparado para producir más que lo que necesita, porque es lo que más felicidad le produce. Pero con estas relaciones laborales sólo cobra lo que su miedo le indica suficiente.

Y como cada vez es más pobre, necesita cada vez menos.

Es lógico entonces que haya dejado de esforzarse perdiendo su máxima virtud. Ya no produce más que lo que necesita. Y eso es letal para la sociedad.

Por eso, y sólo por eso, la mitad del planeta es pobre.

Por suerte ya apareció una letrada comprometida con ese 90% del género humano, para que la especie humana no se extinga confundiéndose con otra especie
Ese abogado es La Cuarta Postura.

Comprometámonos con este Proyecto para evitar un problema mayor que el del calentamiento global: La aceleración incontrolable de la pobreza.

Integra la Unidad Ejecutora que instalará las relaciones laborales sinérgicas.

No más populismo.


QUE EL MIEDO NO BLOQUEE NUESTRA LIBERTAD

martes, 1 de julio de 2014

¿Empleados mucho más rentables?

El empleo informal y el desempleo (que causan muchos otros problemas) se podrían erradicar si lográsemos que los asalariados fueran más rentables, tanto para su patrón como para ellos mismos.

El mercado determina que el sueldo de un asalariado le alcance para sostener su nivel de vida. De esa manera, la suma de los sueldos de los empleados en una empresa refleja el valor mínimo que debió generar la planta de personal durante ese período.

Pero cuando la empresa logra ganancias, el valor de lo que generó el personal es algo mayor que su sueldo.

Es posible determinar el valor de esa diferencia y que los asalariados puedan cobrarla en la medida que generen más que lo esperado, lo cual sería un estímulo.

Se pagaría así a los asalariados por lo que hagan y no sólo por lo que necesiten.

Y para no afectar la rentabilidad actual de la empresa, a esos aumentos por productividad los podría pagar el Estado con lo que esa misma empresa tribute por Ganancias, que generalmente es la tercera parte de las mismas.

Resolviendo tal problema social, el Estado salvaría fácilmente ese bache financiero.
Y la rentabilidad de la empresa se multiplicaría al compatibilizarse objetivos de emprendedor y asalariados.


Ebook